Soap opera

Valentina pregunta todos los viernes por mi soap opera.

La realidad es que no, no me pasan tantas cosas…solo que las vivo con entusiasmo.

Hay veces que ni siquiera pasan: pululan.

Adoro la intensidad, ser consciente y eléctrica lo mismo que la pausa y el refugio de una manta en invierno.

Cada vez más: camino allí arriba y me miro…bueno…lo de la perspectiva, quiero decir…os miro…veo lo que pasa…

No entiendo gran cosa.

Pero todo parece diferente.

Ya está aquíiiii….

Siempre llega.

La Navidad.

Es inevitable, como cumplir años.

Después el Año Nuevo.

Boom.

Y vuelta a empezar, o mejor, a continuar.

Este año mi sentimiento más fuerte a estas alturas es de gratitud. Gracias a los que me queréis, me acompañáis, me enseñáis…porque la vida es más divertida con vosotras: cuando puedo ir a jugar un partido de pádel, y contar el libro que hemos leído y escuchar todo lo que decís, cuando sacáis una revista nueva, cuando escribís un libro, cuando quedamos el viernes a tomar una caña, cuando me haces una paella de caerse de culo, cuando llega un regalo de leche dorada, cuando vamos a ver Sigena, o hacemos un taller de coronas navideñas. Gracias por el inglés y las monjas (las de Bután y las de aquí). Gracias por el yoga y la fotografía. Gracias por los raticos al fuego y debajo de la manta, por los paseos por el monte y las charradas. Gracias por las confidencias, por hacerme sentir importante y por recordarme que ante todo: debemos ser humildes. Gracias por los momentos Pretty Woman, por la piscina, por las playas de Mallorca. Obrigada por estar perdidas, perdidas, perdidas…..y aún así encontrarnos siempre. Gracias por la “Pensión Raquel”. Gracias por no regalarme imanes y hacerme reír tanto. Gracias por saber tantas cosas importantes y no importantes. Gracias también a los imbéciles, perdonad la palabra, ninguno de vosotros lo sois, pero es así. Hay pocos pero los imbéciles existen: y si, me lo hacen pasar mal, pero aprendo mucho de ellos. Por suerte este año solo puedo hablar de dos, una y dos y muy de última hora. Gracias por los objetivos claros, la tranquilidad y “el pico y pala”. Gracias por el cine y los regalos de hacer cosas. Gracias por la amabilidad, la educación, la clase y la dulzura. Gracias siempre por la alegría. Gracias, gracias, gracias.

Este año os he visto muy poco. Y aún así seguís ahí. Más gracias todavía.

Gracias a la vida.

Cuando felicité al Príncipe por su cumpleaños, le dije algo que no se me había ocurrido antes: ya nos deprimiremos cuando estemos muertos. No deberíamos dejar ni imaginar nuevos propósitos para los años nuevos, deberíamos hacerlos y ya.

Que vuelva siempre la Navidad.

Queridas, queridos, soy muy feliz todos los años cuando os digo:

Feliz Navidad.

LA LIBRERÍA ANÓNIMA BY FOTÓGRAF@S ANÓNIM@S

La Librería Anónima Raquel Castán, Ana Mora, Nieves Arbús, Elena Mairal, Peskqi, Sandra Araguás, Marta Bosque

LA LIBRERÍA ANÓNIMA BY FOTÓGRAF@S ANÓNIM@S

Precuela

Te acabo de contar lo de Clara Campoamor. A vences pienso que fui ella, porque cada vez que echo un sobre a una urna, me emociono. Aunque sea para las elecciones sindicales que no me importan demasiado.

Me gusta hacerme la interesante contigo.

A los demás no les cuento estas cosas. Principalmente porque no me entienden.

Solo a ti.

Lo mismo que la gracia de que “hay que ir a Madrid cada 49 días”.

Tú me entiendes.

Nunca he sido la primera en nada. Ni la más guapa, ni la más lista, ni la más admirada, ni la más querida. Siempre relegada mínimo a un segundo lugar desde donde he crecido, me he construido y desde donde me amo.

Adoro la vida desde este lugar.

Pero… me pasa contigo que me veo en un altar, lugar desconocido hasta ahora y del que no quiero bajar en un buen rato.. Quiero aprender esta experiencia, saborearla, y saber qué se siente cuando eres… lo más.

Una nueva perspectiva de mi vida desde la tuya.

Así que he decidido:

enamorarme de ti.

Las Margaritas. Claro que es tarde.

Sucedió.

Como todo lo bueno, se hizo esperar.

Ayer 25 de marzo de 2023, en el café Odeón de Zaragoza, se presentó la revista de Laura y Alberto.

Por fin!!!

Así empezó todo:

Llegamos puntualísimas, salimos del coche bien preticas y contentas las cinco margaritas oscenses: a las 11:55. Luego ya no supimos más que hora era.

Lo primero fue buscar a Alberto y a Laura. Y de inmediato coger esa revista, tocarla, olerla, verla…conocer Las Margaritas fue emocionante.

He de decir que lloré. Mi collage sale en la página de detrás de la portada (que no se como se llama). Con un mini relato que escribí a propósito del mismo. Colaboro muy poquito en la revista, pero cundo barbaridad. Después vi mi poema junto al de Eduardo Triste. Y leí las líneas con las que me presenta la revista…No pude evitarlo.

Ya sabéis que no soy artista, soy terapeuta ocupacional (o eso me parece), que dicho sea de paso: requiere mucho arte. Las Margaritas ha sido un regalo nivel diamante para mí. Colaborar en esta revista tan llena de talento y de gente querida es alegría y gozo supremos. Admiración y agradecimiento. Es como si la revista me hubiera abrazado y dicho a la vez: “te quiero”.

Gracias.

La maquetación: impecable. Alberto maquetador de Las Margaritas, no se como nombrarte, pero te felicito desde aquí. El contenido de la revista es una maravilla y el continente todavía lo ensalza más si cabe.

Luego nos fuimos a pedir un vermut, y vimos que habían venido hasta los de Lanaja. Yo conté unas 150 personas, pero creo que había muchas más.

Y comenzó.

Laura y Alberto son de ese tipo de gente a la que hay que decir “gracias por existir”.

Son como en la foto. Se quieren, son cómplices, se nutren de las cosas que encuentran por la vida, y las que no encuentran las buscan, son catalizadores de personas, crean, generan…juntos son una bomba de vanguardia y talento. Por allá donde pasan crecen las flores.

Y listísimos. Lo de guapos, ya se ve. Muy guapos.

Ellos son Las Margaritas.

Se les quiere mucho.

Y así nos contaron de la revista,cómo surgió,el tiempo que ha esperado.

No se vende, no hay versión online, no redes sociales. Eso sí: tienes que hacerte con las camisetas de la revista, que son monísimas y ayudan a que este proyecto continúe. Porque todos queremos más Margaritas.

María José Hasta: la mujer del momento, en su versión médium nos aclaró que la revista es revista y no fanzine ( o eso entendí servidora). Esta revista siempre se jactará de ser el primer medio en publicarla.

Tras la médium llegó él: DGA. Hizo una brillante introducción en la que animó a la gente a comprar camisetas. Estudio Nicholson dio paso a Islandia. Que nunca existió pero aún así fue creado. Mi grupo musical. Debuté como cantante, sin micro, con la letra en la mano, porque no habíamos ensayado y me daba seguridad. De la mano de David. Fue un acto de amor.

Yo quería estar estupenda para la ocasión. Tenía una falda de Margaritas de mi querida Estela Garro. Tenía unas pestañas preparadas para lucir en la ocasión. Pero de repente sonó el timbre de mi casa y tuve que salir corriendo, con la faja de mi madre que me había puesto de prueba y no pensaba llevar, sin maquillar, sin peinar, sin margaritas…..me salva siempre la alegría de vivir,cuando llegué a Zaragoza me pinté un poco y estaba estupenda igual.

Ya se había presentado, ya teníamos la revista en las manos y llegaron Sr. y Sra. cargados de temazos. Bailamos, reímos, cantamos, celebramos a lo grande.

Sr. y Sra. por favor: es urgente otra fiesta con vosotros.

No os he hablado de Olga, que estuvo a cargo de las camisetas. Y de su hija, tan estupenda como la madre.

La terraza del Odeón estaba de bote en bote con todos nosotros. Estuve con gente favorita que últimamente veo muy poco.

La fiesta continuaba pero nosotras nos volvimos a Huesca con nuestras Margaritas.

Tengo ganas de que la lea todo el mundo. Me llevé un ejemplar para mi biblioteca y otro: para dejar por los bancos de la ciudad.

Esta mañana he leído la editorial y la entrevista a A. Simón Partal. Es buenísima.

Queridos Alberto y Laura: estáis bendecidos.

Las Huesquetas

25 de diciembre

Parece que decir “Feliz Navidad” se ha convertido en una bandera con la que no me identifico.

Así que feliz pastiche de tradiciones que han hecho que estos días propicien la reunión y las buenas intenciones (regalos a parte).

Os deseo tiempo: como en el poema de Elli Michler para reír, para pensar, para los demás, para nosotros, para amar, para perdonar y aceptar….tiempo para vivir.

Y como decía Albert Schweitzer: buena salud y mala memoria para ser felices.

Un abrazo.

Raquel.

Ángeles custodios

En la Alsacia francesa hay mucha Navidad.

Todo muy de “tres bien” y de “je suis desolée”.

Mucho frío, muchas luces, mucho pino y vino caliente.

Mucho portal de Belén, yo creía que los franceses eran más laicos .

Mucha gente sin parar por los mercados: media España aproximadamente.

Mucho espíritu, conciertos, iglesias y calendarios de adviento. Gorro, bufanda, guantes y abrigo.

Mucha Notre Dame de Estrasburgo.

Mucho queso, chucrut y sausages. Tarta flambeada también.

Mucho amor y risas de “ay que me meo”.

Y estos señores con metralleta a cualquier hora dando la vuelta. Muchos.

Un poema de amor prestado

Cuando lo dejes, seremos novios tú y yo.

Que aún no hemos sido.

Qué bonito:

ser novios porque aún no hemos sido.

DGA (conversación de whatsapp)

La queja…

Sobre el derecho a queja y pataleta.:

Si: es necesario. Pero ya, sin demasiado regodeo y a otra cosa.

Salvo excepción de las cosas gordas que son difíciles de digerir.

Luego está lo de ser protestona para hacer énfasis en las cosas que te gustan tal cual son sin necesidad de cambios o desapariciones. Así a modo de queja/guiño.

Fin.

No preocuparse por la foto: es de una tormenta que me pilló hace dos semanas, cuando no sabía nada de lo que iba a pasar después.

De mente

Siempre había sido de la opinión de que lo mejor está siempre por llegar.

No sé si esto es algo que se opina, se piensa o se siente.

De cualquier forma, hoy he sabido que no. Lo mejor no está por llegar:

Lo mejor es ahora.